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El motor del Volkswagen Golf de un empresario de la Isla se paró de golpe a 100 km/h


djbill

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¿Pagar 1.000 € por un defecto de fábrica?

 

El motor del Volkswagen Golf de un empresario de la Isla se paró de golpe a 100 km/h. La marca alemana asume el coste de la avería en Inglaterra pero se lava las manos en España

 

 

Imagínense que pagan 34.000 euros por un Volkswagen Golf de 170 caballos y que a los cuatro años el motor se les para de golpe cuando circulan a 100 kilómetros por hora, poniendo en peligro su vida. Imagínense, también, que en el concesionario les dicen que la reparación les costará casi 1.000 euros y que luego se enteran de que en Inglaterra la marca alemana reconoce que se trata de un defecto de fábrica y asume íntegramente el coste de la reparación.

Esto, tal cual, es lo que le ha pasado a un empresario británico afincado en la Isla, Christopher Morton, al que no cabe en la cabeza que Volkswagen España reconozca que se trata del mismo defecto de manufactura y que en cambio haga pagar su reparación al propietario, al contrario de lo que sucede en Reino Unido, donde un conocido suyo regenta un concesionario de la marca.

Morton sabe perfectamente de lo que habla, puesto que tiene en su poder la carta que Volkswagen Inglaterra ha mandado a todos los concesionarios y propietarios de vehículos de entre 140 y 170 caballos de ese país para advertirles del fallo de la bomba de inyección y ofrecerles una reparación o revisión gratuita.

«¿Qué pasa, que en España es menos peligroso?», se pregunta Morton, que advierte que el fallo súbito de la bomba de inyección a altas velocidades puede resultar fatal si el conductor no sabe cómo reaccionar. «El volante se pone mucho más duro y los frenos dejan de funcionar al cabo de poco rato», explica, tras preguntarse qué hubiera pasado si en ese momento hubiera ido al volante su pareja, con menos fuerza en los brazos. «Es incomprensible que, aceptando que es la misma avería y que es un defecto de fábrica, en Volkswagen España no quieran asumir el coste de la reparación», lamenta el empresario.

Al margen de la discriminación que ello supone para los propietarios de vehículos Volkswagen en España (afecta a todos los modelos con motores de diésel de entre 140 y 170 caballos), Morton también ha ‘topado’ con los precios prohibitivos que tienen aquí las cuatro piezas afectadas por el error de manufactura.

El ejemplo más claro es el de la bomba de inyección, la pieza más importante de las que fallan, que en España tiene un precio de 454 euros y en Inglaterra de 186 euros.

Ante esta realidad, Morton ha optado por traer personalmente las piezas desde el Reino Unido para que el concesionario de la Isla pudiera acometer la reparación con un coste menor. En este sentido, Morton asegura que en el concesionario de Volkswagen Medea Motor, en el polígono de Maó, se han portado bien con ellos, hasta el punto de intentar, sin éxito, que Volkswagen España se hiciera cargo de la avería.

Cabe destacar que Christopher Morton no es un propietario de vehículos Volkswagen cualquiera, puesto que su pasión por la marca alemana les ha llevado a gastarse unos 300.000 euros en la última década en seis coches de la marca alemana (incluyendo el que protagoniza este artículo). No obstante, a raíz de lo sucedido y ante la nula respuesta de Volkswagen España, el empresario británico tiene claro que no lo hará «nunca más».

«No sólo no me lo arreglan sino que querían cobrarme más del doble de lo que pagan en Inglaterra», resume el empresario, que a partir de ahora se decantará por otros fabricantes.

 

Me ha llamado mucho la atención y no haber oido nada en el foro...

 

Fuente: http://ultimahora.es/menorca/noticia/noticias/local/pagar-1-000-por-un-defecto-de-fabrica.html

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