Girando a la izquierda para tomar otra calle, un tipo con un fiat negro se me ha cruzado girando al otro lado, sin previo aviso, y me ha golpeado en la esquina izda de mi parachoques trasero. Pues bien , el tipo ha seguido su camino sin pararse, menudo sinvergüenza. Menos mal que, aunque en principio parecía que me había arañado toda la pintura, cuándo le he dado un agua, un par de días después, prácticamente no se nota nada, simplemente se había quedado adherida la pintura de su coche, pero una vez lavada la zona los arañazos han desaparecido.